Vivimos un tiempo en el que es necesario ser astuto y emplear artimañas. Lando Calrissian acepta robar una nave de lujo —la Imperialis— para saldar una deuda que ha contraído. Decide llevar a cabo el encargo acompañado de un equipo compuesto por su antiguo amigo Lobot; los guerreros clones Aleksin y Pavol; y la sava Korin Pers, especialista en antigüedades. Por desgracia para el equipo, resulta que la nave le pertenece al mismísimo emperador Palpatine.
Una estancia que hay en el centro de la nave esconde un tesoro de antiguos objetos y artefactos sith, pero la protegían dos miembros de la Guardia Imperial de Palpatine, que hieren de gravedad a Lobot. Aleksin y Pavol se enfrentan a los guardias y consiguen derrotarlos. Mientras tanto, Lando y Korin han llevado a Lobot a un tanque de bacta a todo correr.
Parece que los peligros podrían haber acabado, pero el Emperador ha ordenado a su arregladora personal, Chanath Cha, que recupere la nave cueste lo que cueste y la implacable cazadora cada vez está más cerca…
LANDO, un antiguo amigo de Han Solo se convirtió en una de las muchas figuras inolvidables del universo creado por George Lucas. Ahora, Marvel ha decidido otorgarle protagonismo absoluto en su nueva etapa comiquera.
El guionista Charles Soule (La Cosa del Pantano) y el excepcional dibujante Alex Maleev (Daredevil) son los responsables.