“Estamos en 1939. Tengo nueve años. Mis facciones son regulares, lo cual dicen que no abunda entre los judíos. Mamá es alta, esbelta y elegante. Nuestros conocidos dicen que se parece a Greta Garbo...”
Así se ve a sí misma y a los suyos la pequeña Stella cuando los alemanes invaden Polonia. Pero ese ambiente de belleza y buenas maneras cae como un castillo de naipes ante un invasor que no hace diferencias de aspecto físico o de educación. El objetivo nazi es eliminar a todos los judíos de Europa y, por tanto, también Stella irá a parar a un campo de concentración...