Esta novela, basada en una anécdota real, es una denuncia de la indefensión de la infancia en los conflictos armados y el drama que convierte a los niños en soldados.
Finalista del XVIII Premio Anaya de Literatura Juvenil
Selección OEPLI 2021 y elegido uno de los mejores libros del año por El País
Finalizada la guerra, un grupo de hombres armados detiene inesperadamente a los padres y tíos de Bruno y Silvina. Cuatro niños y un bebé se quedan solos e indefensos en la casa que comparten sus familias, abandonados a su suerte en una ciudad hostil en la que los ciudadanos se vigilan unos a otros desde las ventanas.
Bruno y Silvina, acompañados por el fantasma de la pequeña Alicia, desaparecida en un bombardeo, luchan por sobrevivir, cuidar del bebé, de sus primos pequeños y encontrar a sus padres, pese a que la cobardía de vecinos, allegados y desconocidos los va empujando a un callejón sin salida.
La falta de solidaridad hace de los débiles un blanco fácil. Basta un paso en falso para reducir nuestras expectativas de la vida a la estrechez de la mirilla de un fusil.